martes, enero 29

Sara (Capítulo 45)


Me desperté con un dolor horrible de cabeza. Miré a mi lado y me encontré a Harry dormido como un bebé agarrado a mi cintura, estaba guapísimo. Intenté incorporarme sin despertarle pero la cabeza me daba vueltas, sin duda ayer me había pasado con el número de copas. Vi mi vestido tirado en el suelo y recordé el final de la noche, cuando Laura y Zayn se fueron. La fiesta acabó tarde, no sabía hora pero estaba amaneciendo, conseguimos pedir unos taxis después de llamar tres veces, llegamos a casa y le advertí a Harry de que no hiciese ruido que Laura y Zayn dormían pero nos entró un ataque de risa a los dos y yo me caí. Recuerdo también que al llegar a la habitación Harry me quitó el vestido y en lo que él se desvestía yo me metí en la cama y… me dormí. Sonreí al recordarlo
- Buenos días- dijo Harry sacándome de mis pensamientos
- ¿te he despertado?- pregunté mirándole
- No… bueno puede que un poco- se incorporó y me dio un suave beso- uf mi cabeza- protestó
- Ya somos dos- dije mientras salía de la cama- me voy a la ducha en lo que te acabas de despertar
- ¿puedo ducharme contigo?- preguntó con una sonrisa pícara
- Ummm… - dije dubitativa- vale- Harry se sorprendió por mi pregunta y salí de la habitación en dirección al baño. Me encontré con Laura y Zayn en la cocina haciendo la comida
- Buenos días parejita- dije apoyándome en el marco
- Buenos días dormilona- dijo Laura- ¿a qué hora llegasteis?
- Pues… sinceramente no lo sé… estaba amaneciendo, pero… ¿no nos sentisteis llegar?- Zayn negó con la cabeza mientras se metía un cacho de queso en la boca
- Pues sí que tenéis un sueño profundo- dije riéndome. Unas manos rodearon mi cadera
- ¿nos vamos ya?- me dijo Harry
- Buenos días Harold- dijo Zayn
- Buenos días- dijo Harry pendiente de mi respuesta
- ¿ir a dónde?- preguntó Laura
- A ducharnos- dijo Harry agarrándome de la mano y arrastrándome con él a cuarto de baño, por detrás se oyeron las risas de Zayn y Laura
Nos metimos en el baño y Harry cerró la puerta tras de sí y se quitó la camiseta quedándose en calzoncillos, yo también me la quité, Harry me miró de arriba abajo
- No seas pervertido, solo nos vamos a duchar- le aclaré
- Como mandes- dijo quitándose los calzoncillos y metiéndose en la ducha, oí el grifo de la ducha abrirse, me desvestí y me metí dentro. Harry ya tenía en pelo mojado
- Que sexy- dije mientras le daba un beso
- ¿no eras tú la que decías que solo nos íbamos a duchar? Pues mantén las distancias y no perderé el control- yo me reí y me mordí el labio- y tampoco hagas eso- dijo mientras se echaba el champú. Me reí de lo tonto que era y del efecto que seguía produciendo en mí ese ricitos, me preguntaba como seguía haciendo que mi corazón se acelerase con solo mirarle, era algo a lo que me estaba acostumbrando.
Nos duchamos y nos vestimos, Harry se puso unos pantalones y una camiseta que se había dejado el otro día y yo me puse un vestido azul marino de lunares blancos y mis converse blancas. Cuando llegamos a la cocina la comida ya estaba hecha y servida en la mesa
- Ummm que bien huele- dijo Harry
- Así da gusto- dije yo mirando mi plato. Habían hecho lasaña, una ensalada y habían cortado algunos quesos. Todos nos pusimos a comer
- ¿mucha resaca?- preguntó Harry mientras se llevaba un trozo de queso a la boca
- Que va, no como vosotros- dijo Zayn riendo
- Ya… es que con eso de que estabais cansados y os vinisteis antes- dije tranquila. Laura se atragantó con el agua y Zayn se puso colorado, en ese momento Laura me estaba matando con la mirada. Harry y yo nos reímos
- Si… cansados…- añadió Harry, me estaba ganando una muerte asegurada
- ¿qué pasa? No somos tan fiesteros como vosotros- añadió Zayn intentando salir del apuro
- ¿qué Laura no es fiestera? – me empecé a reír a carcajadas- haber buscado mejor excusa Zayn- está vez todos nos reímos y dejamos el tema y nos pusimos a comer hablando de la fiesta de ayer
- ¿sabéis si Adam acabó con la chica esa?- preguntó Laura ya en el postre
- Si- dijo Harry- estuvieron hablando mucho rato, se dieron un par de besos y desaparecieron, al rato llegó Adam y no hablé con él
- ¡yo sí!- dije contenta- al parecer solo le acompañó a casa, la chica le gustó bastante y han quedado hoy
- Me alegro un montón por Adam- dijo Laura con una sonrisa- se merece encontrar a alguien- todos estábamos de acuerdo
Acabamos de comer y nos pusimos a recoger la cocina, estuvimos un rato tumbados en el sofá y luego los chicos se tuvieron que ir.
- Hablamos esta noche- me dijo Harry, me dio un suave beso en los labios y se fue con Zayn
- ¡yo te mato!- gritó Laura en cuanto cerró la puerta. Salí corriendo y ella detrás de mí me puse detrás del sofá
- Soy muy joven para morir- dije haciendo el tonto. Laura me cogió y me empezó a hacer cosquillas hasta que le tuve que suplicar entre lágrimas que parase- ahora en serio- dije colocándome el vestido y secándome las lágrimas- ¿qué tal ayer?- Laura se sonrojó
- Simplemente perfecto, fue muy cuidadoso y cariñoso… genial todo
- Me alegro mucho- dije abrazándola, las dos nos reímos
- ¿qué habrá sido del resto de la gente?- preguntó Laura
- Vamos a verlo- cogí el móvil y nos metimos en el grupo de Whatsapp. Estuvimos un rato hablando con todos de cómo habían amanecido, unos como Rebeca estaban algo peor y con resaca y otros como Liam estaban como una rosa, al rato, Laura y yo nos despedimos de todos
- ¿te apetece tarde de chicas? - preguntó Laura, sabía que con chicas esta vez se refería a ella y yo
- Claro que me apetece- dije eufórica
Cogimos los pintauñas, las revistas, las palomitas y las películas. Estaba todo listo.

domingo, enero 27

Laura (Capítulo 44)


Mientras daba un trago a mi trago vi que Sara salía de la fiesta con Harry, sonreí. La fiesta estaba yendo genial, todos disfrutábamos un montón, sobre todo Rebeca que no paraba de repetir que no se imaginaba otra forma mejor de celebrar los dieciocho. Bailé muchísimo con Zayn, cada vez que se me acercaba mi cuerpo ardía, y se me disparaba aún más el corazón. No sabía si era la música, el alcohol, o el deseo... quizás las tres cosas a la vez. Cuando se me acabó el trago que me estaba bebiendo me acerqué a la barra para pedir otro y me encontré con Mark que estaba pediendo otro más para Alison.
- Gran fiesta eh. - me dijo sonriente.
- Sí, es fantástica. - me di cuenta de que hacía mucho que no hablaba con Mark a solas, no había pasado mucho tiempo desde que lo habíamos dejado pero sentía que había sido hacía siglos. Y me encantaba que estuviese con Ali, hacían una bonita pareja y vivían los dos en Londres. Nosotras habíamos hecho que se encontraran.
- Laura, me alegro de que todo saliera como salió.. ¿sabes? - asentí y sonreí.
- Yo también Mark, tu chica era Alison... no yo, y es genial que estéis juntos.
- Lo mismo digo, tu chico era Zayn, hacéis una pareja perfecta... y bueno, sé que al principio lo llevé un poco mal pero supongo que ninguno de los dos teniais la culpa de lo que pasó. - sonrió y cogió sus dos vasos de la barra. - Bueno, Ali me espera. Disfruta de la fiesta. - Me dió un beso en la mejilla y se fue a dónde Alison. Les miré y no pude evitar sentirme más relajada. La cabeza me daba vueltas y de repente sentí unos brazos rodearme la cintura.
- ¿Todo bien? - me susurró Zayn al oído.
- Mejor que bien. - le contesté. - ¿Quieres beber más?
- No, y tú tampoco vas a beber más... - me dijo al oído.
- ¿Por qué?
- No quiero que estés borracha cuando lleguemos a casa.
- ¿Lleguemos? - le pregunté algo extrañada, no entendía lo que quería insinuar pero no me contestó. Solo se acercó más a mi y me dio un beso en los labios, un beso que hizo que mis piernas temblaras. - Díos mío Zayn.. no hagas eso.
- ¿Hacer el qué? - dijo con una sonrisa demasiado sexy.
- Intentar seducirme - dije, y los dos nos empezamos a reír a carcajadas.
- ¿Funciona? - pregunto bajando sus manos desde mi cintura hasta mi culo.
- Demasiado. - respondí casi en un susurro, rodeando su cuello con mis brazos y dándole un suave beso en los labios. Después me separé de él y le dije:
- Tengo que ir al baño.
- ¿Eso es una propuesta?
- No Zayn. - dije volviéndome a reír. - Tú espérame aquí anda... - puso carita de pena y yo me fui hacía el baño. Justo en ese momento Sara apareció entre la gente de la mano de Harry, su increíble moño estaba algo menos increíble que antes y tenía una sonrisa en la cara. Me miró y cuando se me acercó le dije que iba al baño.
- Te acompaño. - me contestó, mirando a Harry con una mirada que decía: vuelo enseguida. Harry giñó un ojo y se acercó a los demás.
- ¿Dónde te has metido pequeña? - le dije cuando llegamos al baño. Me miró con una sonrisa y unos ojos brillantes que lo decían todo. - Vale, no hace falta que respondas... - le dije y las dos nos echamos a reír.
- La cabeza me da vueltas... - me dijo cuando ya habíamos salido del baño.
- Y a mi... - le contesté. - ¡Mira Sara! - le  dije señalando con la cabeza a Adam, estaba hablando con una chica muy mona, sentados en una esquina. Los dos sonreían muchísimo.
- A lo mejor por fin ha encontrado a su chica. - me dijo Sara.
- Esperemos. - contesté. Las dos nos alegramos bastante por él, lo estaba pasando mal por ser el único desparejado.
- ¡Chicaaaaaaaas! ¡Esto es genial! - Rebeca se acercó a nosotras chillando de felicidad.
- ¿Te está gustando la noche?
- ¿Gustarme solo? Es un sueño... madre mía, los sueños se hacen realidad eh. - Sara y yo nos miramos y sonreimos. Estabamos de acuerdo con ella. Miré a mi al rededor, y aunque la cabeza me daba vueltas, y la música retumbaba ya en mi oídos pude comprobar que todos estaríamos de acuerdo en eso. Sí, los sueños se hacen realidad. Miré a Zayn y pensé en que ahora era mi novio, vi a Harry y a Sara, a todos los demás chicos, que ahora eran grandes amigos nuestros. Estabamos en una fiesta de Londres con toda esa gente, vestidas como princesas con nuestros príncipes y tenía mi tatuaje soñado en el tobillo. Si que se hacían realidad.
Me acerqué a Zayn y le dí un beso en la mejilla y le susurré al oído:
- Ya he vuelto...
- Laura, ¿podríamos ir a casa no? - le miré sorprendida, tenía una enorme sonrisa en la boca. Entonces entendí lo que pretendía, entendí lo que quería hacer y por un momento me planteé si yo también quería que ocurriera. Claro que quería.
- Sí, ¡vámonos! - le dije. Me acerqué a Rebeca, Sara y Dani que estaban bailando juntas.
- Chicas, Zayn y yo estamos ya algo cansados y bueno... nos vamos a casa... ¿vale? - Al oírme decir eso las tres me miraron de golpe. Y empezaron a reír.
- Claro Laura... ir a descansar... - me dijo Rebeca giñándo un ojo. No se lo habían creído, pero yo me reí y les dí las buenas noches. Me acerqué a Zayn y le agarré de la mano.
- ¿Nos vamos pequeña? - Asentí. - ¿A tu casa o a la mía? - no pude evitar reír, después saqué las llaves del apartamento de mi bolso y se las enseñé.
- A la mía. - Zayn llamó un táxi y nos montamos en él. Me rodeó con el brazo en el táxi y apoyé mi cabeza en su hombre. Sentía su respiración cerca de mi cuello y se me ponían los pelos de punta.
- ¿Tienes frío? - me dijo. Negué con la cabeza y su mano empezó a acariciar mis piernas, el vestido no las tapaba demasiado quizás. Cuando llegamos el táxi paró, Zayn pagó y salimos. Subimos las escaleras del apartamento y yo sentía como la borrachera se me iba pasando pero me iba poniendo cada vez más nerviosa. Abrí la puerta con dificultad y él no paraba de reír y sonreírme. Después entramos y lo primero que hice fue quitarme los zapatos.
- Dios mío, mis pies me estaban matando. - le dije mientras me los quitaba.
- ¿Y el vestido? ¿No tienes ganas de quitártelo también? - me contestó quitándose la chaqueta. Sonreí, y me quedé mirándole. - Preciosa, ¿estás bien?
- Sí... solo estoy.. nerviosa...
- No tienes por qué estar nerviosa tonta. No vamos a hacer nada que no quieras hacer, te lo prometo... eso ya lo sabes.
- Quiero hacerlo Zayn, de verdad... - Zayn sonrió, me cogió de la mano y me llevó a mi habitación. Me besó dulcemente en la boca, después en el cuello y mi corazón cada vez se aceleraba más. Después me dió un beso en el hombro y desabrochó la cremallera de mi vestido. De repente todo mi miedo se desvaneció, y las ganas de él fueron más fuertes que todos los nervios del mundo, poco a poco empecé a desabrocharle los botones de su cabeza hasta quitársela del todo. Él se deshizo de mi vestido, y empezó a besarme por todo el cuello.
- Te quiero... - le susurré mientras intentaba desabrochar sus pantalones y sacaba un preservativo del su bolsillo.
- Yo también te quiero Laura, eres lo mejor que me ha pasado nunca. - me miró a los ojos y cuando ya estábamos completamente desnudos y sentía más calor que nunca me dejé de llevar. Dejé que nos fundiéramos en uno. Después me dormí, pero en algún momento de la noche sé que me desperté, por una pesadilla o algo así probablemente pero al abrir los ojos le ví abrazándome los dos desnudos y me sentí más feliz y protegida que nunca.

jueves, enero 24

Sara (Capítulo 43)


Nos empezamos a vestir todas con los vestidos que habíamos comprado entre risas y música a todo volumen, Rebeca no se esperaba todo lo que le esperaba en esa noche.
Estábamos acabándonos de maquillar Dani, Laura y yo cuando Rebeca entro por la puerta del baño con el vestido puesto, estaba impresionante, a Niall se le caería la baba
- Estas… increíble- dijo Laura
- Lo sé- dijo Rebeca haciendo el tonto- aunque no aguantare mucho en estos tacones – protestó mirándolos. Le habíamos hecho un recogido con todo el pelo y le habíamos puesto un maquillaje muy finito pero bonito
- Bueno nos acabamos de maquillas y nos vamos- dijo Dani. Acabamos de maquillarnos y cogimos los móviles, llaves, bolsos y dinero. Decidimos no llevar chaqueta. Antes de salir nos dimos todas el visto bueno.
Ali llevaba el pelo recogido en una trenza de lado y un maquillaje que resaltaba sus labios, pintados de rojo, Dani se había alisado el pelo y tenía un semirecogido con los ojos pintados de colores dorados, Eleanor llevaba el pelo rizado y le caía en cascada hacia un lado y un maquillaje muy natural, Laura se había rizado el pelo y llevaba recogido la mitad con un pequeño tupé y un maquillaje oscuro que le favorecía y yo llevaba mi melena recogida en un moño suelto con algunos mechones fuera y un maquillaje oscuro en los ojos.
- Prefectas- dijo Eleanor y salimos de casa dispuestas a comernos la noche. Cuando bajamos ya estaba abajo dos taxis esperándonos
- Y ¿a dónde vamos?- preguntó Rebeca
- Tú déjate llevar y empieza a disfrutar de tus dieciocho - le dije. Nos montamos en un coche Laura, Eleanor y yo y en el otro las demás.
Llegamos a la discoteca que los chicos habían alquilado para la fiesta
- Esta es la mejor discoteca de Londres- dijo Ali
- ¿y nos dejarán entrar?- preguntó Rebe ingenua a todo
- Eso espero- dijo Dani haciéndose la tonta. Nos acercamos a la puerta y entramos directamente sin decirle nada a los dos porteros que estaban en la puerta, Rebeca estaba alucinando de que nos hubiesen dejado entrar. Todo parecía un fiesta normal, había gente bailando y decidimos dejar los bolsos en el guardarropa, no teníamos ni idea de lo que los chicos tenían pensado hacer así que fuimos a por un cubata
Estábamos ya en la pista bailando, con el vaso de la mano y disfrutando de la música cuando vi a Rebeca algo apagada
- Disfruta de tu noche, nada de caras largas ¿qué pasa?- le pregunté gritándole al oído por lo alto que estaba la música
- Nada, es un tontería, déjalo y disfrutemos de la noche- dijo intentando sonreír, la miré extrañada pidiendo una explicación- está bien…- cedió- es que Niall todavía no me ha felicitado… no sé… es una tontería…
- Verás como no tarda en hacerlo- dije segura, Rebeca no pareció creerme pero sonrió y empezó a bailar con todas. De repente la música se paró, todas nos miramos extrañadas. Las luces de la discoteca se apagaron completamente y comenzó a sonar las voces de los chicos cantando el cumpleaños feliz, un foco enfocó a los cinco chicos vestidos con esmóquines que estaban encima de un escenario del que no sabíamos de su existencia hasta ese momento de lo grande que era el sitio. Todo el mundo comenzamos a cantar el cumpleaños feliz y Rebeca no podía apartar la mirada de Niall. Acabaron de cantar y todos nos pusimos a aplaudir
- Por favor que suba la del cumpleaños al escenario- dijo Lou imitando a una cajera de supermercado. Rebeca empezó a negarse pero entre todas la ayudamos a subir al escenario.
Rebeca subió algo tímida y todos los chicos le dieron un abrazo común y la fueron felicitando uno a uno, el último fue Niall que se quedaron mirándose en medio del escenario, Rebeca corrió y se abrazó a Niall
- Feliz cumpleaños mi princesa- se oyó por los altavoces, Niall se había dejado el micrófono demasiado cerca y todos lo habíamos escuchado, los dos se sonrojaron
- Ohh- empezó a decir todo el mundo. Entonces Niall cogió de la cara a Rebeca y la besó. Todos aplaudimos y se bajaron del escenario
Cuando ya estábamos reunidos todos con Mark y Adam, que al parecer estaban detrás del escenario, Rebeca se puso a hablar
- ¡estabais compinchados todos!- todos nos reímos- jope, muchas gracias, de verdad, no me lo esperaba
- ¡no tienes que darlas mujer!- dijo Mark animado
Harry se me acercó por la espalda y me rodeó la cintura
- Estás increíblemente impresionante- dijo mientras me daba un beso en el cuello. Me giré y le miré de arriba abajo
- Tu tampoco te quedas atrás guapísimo- dije mientras le acariciaba el cuello, se acercó más a mí y rodeándome por la cintura me dio un beso
- Ummm, ahora estás a mi altura- era cierto con los taconazos que llevaba era más o menos de su altura- aunque todavía te saco unos centímetros dijo presumiendo y yo me reí
Nos sentamos todos en unos sofás más apartados de todo y decidimos darle ahora todos los regalos antes de que todos siguiésemos con la fiesta
- Primero el mío y el de Louis- dijo Harry entregándole un sobre a Rebeca, cuando lo abrió se sonrojó y lo volvió a guardar
- ¿pero qué es?- preguntó Laura que estaba sentada con Zayn quien le rodeaba con el brazo
- Un viaje… para mí y para Niall… al caribe una semana…- dijo sonrojándose al igual que Niall que se rascó la cabeza. Todos nos reímos ante el gesto de los dos
- ¿y las gracias?- dijo Louis
- Gracias chicos- dijo sonriendo
- Ahora el de todas las chicas- dijo Dani cogiendo el osito gigante envuelto y el álbum
- No tenías que regalarme nada más…- protestó Rebeca
- Tú calla y ábrelo- le dijo Alison
- A la orden- dijo Rebeca abriendo el oso gigante- ¿y dónde meto yo este bicho tan grande?- se río- me encanta
- Ahora el otro- dije yo. Cogió el álbum y cuando lo abrió empezó a pasar todas las paginas sin decir ninguna palabra, todos estábamos en silencio esperando a que dijese algo, cerró la última página y se quedó en silencio
- Bueno, di algo- dijo Eleanor nerviosa
- Es precioso… dijo casi en un susurro- gracias…- Niall la abrazó y Rebeca respiró hondo, se había emocionado
- Bueno ahora el nuestro- Dijo Adam entregándole un sobre- no sabíamos muy bien que regalarte…- dijo excusándose. Rebeca abrió el sobre y sacó una tarjeta que suponíamos que tendría dinero para que se comprase lo que quisiese
- Muchas gracias- dijo Rebeca
- Ahora el nuestro- dijo Liam mientras le daba una caja. Dentro había una cámara réflex
- Jope, ya no sé qué decir, muchas gracias
- Pues ahora queda el mío- dijo Niall- cierra los ojos- dijo, Rebeca le obedeció y cerró los ojos, Niall abrió una caja y saco un collar con un corazón, me acordé del collar que teníamos Harry y yo y me toqué el collar, le miré y el me acarició la cara. Cuando Niall le puso el collar Rebeca abrió los ojos
- Niall…- dijo mirando el collar, elevó la cabeza y le miró a los ojos- te quiero- luego le dio un suave beso en los labios y todos aplaudimos
- Y ahora ¡que siga la fiesta!- dijo Louis
Todos nos dirigimos a la barra, nosotras a por nuestra segunda copa y luego a la pista. La noche avanzaba y el número de cubatas subía, todos estábamos en la pista bailando, Rebeca había decidido quitarse los zapatos y bailaba descalza y todos íbamos algo contentos, la cabeza no paraba de darme vueltas. La música recorría mi cuerpo y cerré los ojos para sentirla mejor, habíamos conocido a algunos famosos como las Little Mix, Katy Perry, Rihana y Bruno Mars, sonreí de pensar en lo bien que me lo estaba pasando, me acerqué a Laura que estaba bailando demasiado pegada a Zayn
- Uy- dijo, me entró la risa y me reí- no quería interrumpir- dije entre risas, me giré y me choqué con Harry
- ¿a dónde te crees que vas?
- Ummm- dije apoyándome en su hombro- pues iba en busca de Laura pero está ocupada- Harry bajo sus manos a mi cadera y me reí, él también se río
- Te invito a un chupito- dijo
- Echo- nos acercamos a la barra y Harry pidió un chupito de tequila
- ¿dónde quieres que nos casemos?- preguntó cogiendo los vasos
- ¿qué?- pregunté creyendo haber oído mal y me repitió la pregunta- pero ¿nos vamos a casar?- pregunté algo incrédula
- Claro- dijo seguro tendiéndome el vaso, decidí seguirle el juego
- Estás loco…- dije, luego miré hacia abajo-Pues ¡en la playa!- dije efusiva
- Loco por ti- dijo mirándome a los ojos-Pues brindo por nuestra boda en la playa- chocó su vaso de chupito con el mío y cayó un poco del líquido, me reí y me tragué el tequila sin coger ni sal ni limón. Toda la garganta y el esófago me ardía y me reí de la situación
- Vamos a la pista- dije agarrándolo de la mano. En la pista empezamos a bailar juntos, Harry me agarraba del culo y yo le rodeaba con los brazos, tenía mucho calor, empecé a besarle el cuello y el me intentó pegar más a él, me agarró la cara y me dio un beso violento, bajó por mi cuello y me dio mordisquitos, me volvió a besar, me agarró fuerte del culo y me mordió el labio inferior. suspiró
- Quiero hacerte mía, ahora- dije imponente
- Hazlo- le dije con tanto deseo como el- me cogió de la mano y me sacó de la pista de baile.

domingo, enero 20

Laura (Capítulo 42)


Me desperté con el sonido del teléfono, y Sara respondiéndo:
- ¿Sí? - oí desde mi habitación. Abrí los ojos y vi a Zayn a mi lado, estaba dormido y sus brazos rodeaban mi cintura. Sonreí. Nunca he sido de las que se despiertan de buen humor, pero era inevitable no ser feliz con Zayn a mi lado. Le di un suave beso para despertarlo. Pero no lo conseguí, así que empecé a darle muchos besos, por toda su cara. Hizo ruidos raros y abrió los ojos.
- ¿Podrías despertarme así todas las mañanas de mi vida? - Me dijo dándome un beso en los labios. Asentí con la cabeza.
- ¡Venga! Hoy nos espera un gran día. - le dije, levantándome de la cama.
- ¿Por qué?
- Porque lo digo yo. - Zayn también se levantó. Cogí unos pantalones de un pijama que había tirado por el suelo y Zayn se puso sus vaqueros, no era buena idea salir en bragas y calzoncillos. Pero yo seguía con su camiseta puesta, y él salió a pecho descubierto. En la cocina preparando el desayuno nos encontramos a Harry y Sara, estaban cantando bajito y bailando mientras ponían la mesa.
- ¡Buenos días dormilones! - nos dijo Sara con una gran sonrisa.
- Buenos días. - le contesté también muy sonriente.
- ¿Se estaba bien en la cama no? - dijo Harry mirándo a Zayn con una sonrisa traviesa. Nos sentamos a la mesa y empezamos a desayunar las tortitas que habían preparado Sara y Harry.
- He tenido una idea... - nos dijo Sara.
- Miedo me das pequeña. - le dijo Harry. Todos reímos, y después miramos a Sara esperando a que nos contase su idea.
- ¿Y si nos vamos todos juntos hoy al parque de atracciones?
- ¡Síiiiiiii! - no pude ocultar mi emoción, siempre he sido fan de las ideas de Sara. - Yo quiero, yo quiero, yo quiero.
- Por vuestra culpa es el verano que menos estamos trabajando... - dijo Zayn sonriendo mientras nos miraba. Sara y yo pusimos cara de penita, de cachorrito.
- No empecéis... - dijo Harry. Se echaron a reír.
- Vale, vale, vamos al parque de atracciones... - dijo Zayn al final. Me avalance sobre él y le di un beso en la cara.
- Habrá que ducharse, vestirse y llamar a los demás, ¿no? - dijo Sara.
- Nosotros dos tendremos que ir a casa a cambiarnos de ropa y ducharnos y eso. - dijo Zayn.
- ¿Y no podemos ducharnos aquí? - dijo Harry mirando a Sara con una sonrisa traviesa de las suyas. Sara sonrió y se ruborizó un poco, yo empecé a reír. Y corrí hasta el baño.
- ¡Yo voy primera! - dije cuando ya estaba en la puerta del baño. Zayn me miró y puso carita de pena.
- ¿No me dejas ducharme contigo? - me dijo.
- No... - dije, y me encerré en el baño antes de que todos pudieran ver mi cara ponerse muy colorada. Les oí reirse desde la cocina. Me desnudé y me metí en la ducha. Cuando salí Sara me dijo que Harry y Zayn al final se habían ido a su casa y que ya habían avisado a los demás, habíamos quedado en la puerta del parque de atracciones en dos horas. Estaba cerca de nuestro apartamento asíque Sara y yo decidimos ir andando. Mientras ella se duchaba yo me vestí. Me puse unos shorts blancos con una camiseta ancha azul marino. Me recogí el pelo con una tenza para estar más cómoda y después me puse una sandalias marrones. Cogí mi mochilita marrón para meter mi móvil y mi cartera, era más cómodo que llevar un bolso. Cuando Sara salió de la ducha se puso unos shorts vaqueros y una camiseta de tirantes con la espalda al aire blanca y sus sandalias preferidas. Cogimos nuestras gafas de sol y nos fuímos dando un paseo hasta el parque de atracciones. Fuimos las primeras en llegar y decidirmos tomarnos un refresco en el bar de enfrente mientras iban llegando los demás.  Los primeros en llegar fueron Mark y Adam, después llegaron El, Dani, Ali y Rebe. Nos sentamos todos a esperar a los chicos.
- Estos famositos... nunca llegan puntuales eh. - dijo Adam riéndose. Me alegró verle más animado que la noche de la fiesta, pensé que a lo mejor en la fiesta de Rebeca conocía a alguien especial o algo. Diez minutos tarde, pero los chicos llegaron, los cinco juntos. Compramos la entrada para el parque de atracciones y entramos todos juntos, entre bromas y risas. Sara sacó su cámara de fotos que había guardado en mi mochila.
- A ver si hacemos fotos igual de divertidas que cuando hicimos surf eh. - le dije. Las dos nos reímos.
- La pena es que ya no podremos ponerlas en el álbum de Rebe... - me contestó ella bajito, sin que nadie nos oyese. Puse carita de pena.
- No te preocupes, haremos un álbum de este verano. - le dije. Sonrió, era una gran idea.
- ¿Dónde montamos primero? - nos preguntó Niall.
- No sé... no sé... a mi me dan un poco de miedo algunas eh. - dijo Rebe.
- No te preocupes, a mi también... - le dije yo. Zayn se acercó a mi, me abrazó por detras y me dijo:
- Yo te quito el miedo pequeña.
- Pues nos vamos a la montaña rusa. ¿Vale? - propuso Lou. A todos nos pareció bien así que decidimos ir a la montaña rusa. Mientras hacíamos cola yo estaba algo nerviosa, y Rebeca también, a algunos nos daba algo de miedo, otros estaban emocionados. Pero todos nos reíamos. Al final nos llegó el turno. Tenía a Sara a mi lado estaba atacada, le encantan estas cosas. A mi otro lado estaba Rebeca, decidimos sentarnos juntas para pasar el miedo. Cuando la atracción se puso en marcha el estómago me dio un vuelco pero después de todo lo que chillamos y reímos nos volvimos a montar otras cuatro veces, igual que en todas las demás atracciones. Pasamos horas montándonos en todas.
- Oye, yo ya tengo hambre... - dijo Niall. Miré el reloj y me di cuenta de que ya eran casi las cuatro de la tarde y no habíamos ni comido.
- ¿Perritos calientes? - dijo Liam señalando un puesto que los vendía.
- ¡Siiiiiiii! - contestamos todos a la vez. Así que nos acercamos al puesto y pedimos un montón de perritos calientes. Cuando ya nos habíamos llenado Danielle nos propuso entrar en la casa del terror. Nos pusimos en la cola, me acerqué a Zayn.
- Esto si que me da miedo eh... - el sonrió y me agarró de la mano.
- Pues te vienes conmigo pequeña. - le dí un suave besito en los labios. No me separé de él en toda la atracción, oía a los demás chillar y escondía me cabeza en sus hombros mientras él me abrazaba.
Después nos montamos en las de agua, acabamos empapados y como ya habíamos estado en todas y se estaba haciendo tarde decidimos irnos a cenar y descansar un poco.
- Bueno, ya que mañana es el cumple de Rebe podríamos hacer noche de chicas en nuestro apartamento... ¿no? - comentó Sara mientras salíamos del parque.
- Vale... - dijo Rebe. Todos nos miramos y sonreímos, se le notaba algo decepcionada. Supongo que esperaba algo más por su cumpleaños, lo que ella no sabía eran todas las sorpresas que le esperaban. Dimos un beso a los chicos.
- Luego nos vemos. - le dije a Zayn al oído mientras le daba un beso en los labios. Ví como Rebeca le daba un beso a Niall y él le sonreía y le decía:
- Mañana te veré con una añito más. - los vestidos que nos habíamos comprado todas para aquella noche estaban en nuestro apartamento, así que cuando llegamos nos secamos bien y llamamos para encargar unas pizzas. Cuando llegaron y empezamos a cenar dieron las 12, y como quien espera las campanadas de noche vieja esperamos hasta el último segundo y nos abalanzamos todas hacía Rebeca cantándo feliz cumpleaños.
- Tenemos muchas sorpresas para ti esta noche... - le dije a Rebeca sonriente.
- Pero vamos a ir poco a poco eh. - le dijo Alison.
- La primera es que nos vamos de fiesta. - le dijo Sara. Todas empezamos a reír.
- ¿De fiesta? ¿Así vestidas? - nos dijo Rebeca.
- Esa es la segunda sorpresa. - le dije Eleanor sacando de detrás del sofá una caja. Rebeca la abrió y vió su precioso vestido. Empezó a chillar como loca.
- ¿Esto es mío? ¿En serio? - todas echamos a reír.
- Sí Rebe, esta es tu noche. - le dijo Danielle giñándole un ojo.
- Nosotras también nos hemos comprado vestidos, así que... vamos a ponernos guapas e irnos de fiesta. - gritó Sara mientras abría el armario y sacaba todos nuestros vestidos.
- Esto es genial chicas.
- Pues recuerda que quedan muchas más sorpresas. - le dije a Rebeca sonriente.

martes, enero 15

Sara (Capítulo 41)


Después de dar un paseo los cuatro nos fuimos a comer a un restaurante. Nos pusimos en una mesa un poco más apartada del resto.
- ¿qué queréis comer chicas?- preguntó Zayn
- Ummm- dije dubitativa mirando la carta- me da igual, todo parece estar rico y tengo hambre- dije cerrando la carta
- Pues entonces pido yo por ti- dijo Harry. Cuando se acercó el camarero Harry le señalo en la carta lo que quería y pidió dos de esos, Laura pidió pescado a la plancha y Zayn un chuletón. Al poco rato el camarero llegó con los cuatro platos
- ¿Tacos?- pregunté mirando mi plato- No los había visto en la carta- todos reímos y comenzamos a comer .El resto de la comida fue bastante tranquila, solo vinieron un par de fans a pedir autógrafos.
Decidimos tomar el postre en otro sitio y nos fuimos a una heladería a por unos batidos. Cuando los tuvimos nos fuimos a dar un paseo por un parque
- ¿ya tenéis todo lo del cumpleaños de Rebeca preparado?- preguntó Harry mientras me daba la mano. Sonreí ante su gesto
- Si-dijo Laura- mañana quedaremos todas para dormir en nuestro apartamento a las doce la felicitaremos y hay empezará todo- dijo Laura riendo, el resto también reímos
- ¿qué le habéis comprado?- pregunté curiosa
- Es una sorpresa- dijo Harry haciéndose el interesante
- Venga, decírnoslo- suplico Laura
- No y no pongas esa carita de pena que no te lo voy a decir pequeña- dijo Zayn a Laura, esta sonrió. Yo miré a Harry con carita de pena
- No pongas esa cara- dijo Harry, yo intenté dar mas pena, me paré delante suyo y le puse ojitos- ¡Zayn!- dijo- está usando sus ojitos contra mí- Zayn intentó ayudar a Harry pero Laura le agarró para que yo consiguiera sacárselo a Harry
- Venga ricitos- dije acariciándole el brazo
- Zayn…- dijo intentando separarse pero le agarré del cuello
- ¡no la escuches!- dijo Zayn
- Moreno, calladito estás mas guapo- dijo Laura mientras le callaba con un beso. Me acerqué al oído de Harry
- Si te portas bien y me lo dices te recompensaré- susurré en su oído mientras acariciaba sus rizos, fui a besarle pero unas manos nos separaron
- Lo siento, no he podido retenerle más- dijo Laura
- Harry dime algo- dramatizó Zayn- dime que no le has dicho nada- suplicó Zayn
- No- dijo Harry- pero ha estado a punto, es buena en esto de convencerme- dijo mirándome a los ojos, sin saber por qué me sonrojé
- Menos mal- suspiró aliviado Zayn. Laura y yo nos reímos y desistimos en la misión de sacarles la información
- Chicas, tenemos que irnos – dijo Harry con carita de pena- tenemos que hacer cosas- Harry y Zayn se miraron y sonrieron
- Cierto- añadió Zayn que se acercó a Laura y le dio un suave beso en los labios. Harry hizo lo mismo y me dio un beso que se alargó un poco más
- Ya hablamos esta noche- me dijo Harry al oído, me volvió a dar otro beso y nos despedimos de ellos
- ¿Qué crees que traman esos dos?- preguntó Laura mientras nos sentamos en el césped de un parque.
- No lo sé, pero nada bueno- dije, las dos reímos - ¿te parece que llamemos a las chicas para dar un vuelta?
- Claro- dijo Laura. Llamamos a todas las chicas pero Dani no podía que había quedado con Liam y Eleanor había quedado con una prima así que quedamos con Rebeca y con Alison en quince minutos en el parque que estábamos.
Laura y yo nos tumbamos en el césped hasta que vinieran pero un siseo empezó a sonar y nos empezamos a mojar, Laura y yo salimos corriendo. Los aspersores se habían encendido y nos habíamos empapado, ante la situación nos empezamos a reír, no podíamos parar de reír nos había entrado la risa tonta por una bobada y la gente que pasaba por la calle nos miraba como si estuviéramos locas, nos sentamos en un banco y por fin se nos pasó el ataque de risa. Al poco rato llegaron Alison y Rebeca
- ¿habéis llorado?- nos preguntó Rebeca nada mas vernos
- Si, de risa- dijimos al unísono y le contamos la tontería que nos acababa de pasar mientras echábamos a andar
- ¿sabéis que pasado mañana es mi cumple?- preguntó Rebeca ilusionada
- ¿a si?- me hice la tonta- ni me acordaba
- Muy bonito Sara- dijo Rebeca ofendida- yo se cuando es el tuyo, el veinticuatro de abril- dijo segura yo comencé a reírme
- En realidad es el veinticinco- dije sin parar de reír
- Bueno un día arriba un día abajo- dijo excusándose Rebeca- pero tú ni te acordabas
- Bueno no me mates- protesté, no se esperaba para nada lo que le habíamos preparado- mira para recompensarte mañana dormimos todas juntas en nuestro apartamento ¿te parece?- Laura y Alison no paraban de reírse y todo parecía salir a pedir de boca, ya no tendríamos que inventarnos nada para mañana
- Esta bien, pero esta te la guardo- añadió Rebe. De repente una gota me cayó en el hombro. Miré hacia el cielo y lo encontré gris y otra gota cayó en mi frente
- Deberíamos irnos o nos mojaremos- dijo Laura. Todas estuvimos de acuerdo y pusimos rumbo a nuestro apartamento pero cada vez llovía mas fuerte y aumentábamos el ritmo
- Esperad- dijo Rebeca, todas nos giramos- ¿nunca habéis querido empaparos con el agua de la lluvia?- todas nos miramos, la verdad es que yo siempre había querido
- A mi me encantaría- dijo Laura, todas dijimos lo mismo y decidimos ir mas lentas empándanos hasta los huesos hasta que llegamos a casa
Cuando llegamos Laura se metió primero en la ducha, detrás fui yo y luego Alison y Rebeca, a quien tuvimos que dejar algo de ropa, luego nos pusimos a merendar mientras veíamos llover. Estuvimos toda la tarde hablando. Hablamos de Adam, de los chicos y de los padres de Rebeca que al parecer se iban mañana por la mañana. Cuando se hizo tarde Alison y Rebeca decidieron marcharse.
- Aún no a parado de llover- le dije a Laura mirando por la ventana
- Ya- dijo mientras bebía un vaso de agua. El timbre sonó. Laura y yo nos miramos extrañadas- serán Rebe y Ali que se habrán dejado algo
- Voy a abrir- dije de camino a la puerta. Cuando abrí la puerta me encontré con Zayn y Harry
- Traemos películas ñoñas- dijo Harry enseñando una bolsa
- Y palomitas- dijo Zayn enseñando otra
- Pasad- dije con una enorme sonrisa en la cara- ¡Laura!- grité- mira quien ha venido- Zayn fue al encuentro de Laura y Harry me besó enérgicamente
- ¿el DVD?- preguntó con una sonrisa
- Debajo de la tele ricitos- dije acompañándole mientras Laura y Zayn estaban en la cocina haciendo palomitas
Llevábamos un poco de pintas, las dos íbamos con pantalones de chándal cortos y una camiseta ancha, Laura con un moño y yo con una coleta pero nos dio igual y cuando estuvieron las palomitas nos pusimos a ver la película. Harry y yo nos sentamos en un sofá y Laura y Zayn en otro. Harry me pasó el brazo por encima y yo apoyé la cabeza en su hombro y antes de que la película empezara le di un beso.
La película acabó y Laura y yo acabamos llorando como siempre mientras que Harry y Zayn se había quedado dormidos, estaban muy graciosos así que fui a por la cámara y les eche un par de fotos y aunque estaban muy monos tuvimos que despertarle
- ¿os a gustado la película?- pregunté
- Me ha encantado- dijo Zayn estirándose
- Lo sentimos- se disculpó Harry como un niño pequeño
- ¿por qué no os quedáis a dormir?- preguntó Laura, la verdad es que parecían cansados
- No me lo digas dos veces- dijo Harry mientras se levantaba del sofá y me llevaba a mi habitación- hasta mañana parejita- dijo Harry con una sonrisa maliciosa
- ¡Harry quiero dormir así que no hagáis ruidos!- gritó Zayn y se oyó por detrás a Laura protestar. Harry y yo reímos y él se empezó a desvestir
- ¡solo vamos a dormir imbécil!- gritó Harry
- ¡vale cariño!- volvió a gritar Zayn mientras nos metíamos en la cama
- Ya verás como se quejen mañana los vecinos-dije. Harry me agarró de la cintura y me atrajo hacia el
- Que protesten lo que quieran- dijo antes de darme un beso en los labios- buenas noches pequeña, te quiero
- Buenas noches cielo yo también te quiero- apoyé mi cabeza en su torso y me dormí.

lunes, enero 14

Laura (Capítulo 40)


Fue algo complicado pero conseguimos vestirnos todas, Sara y yo rescatamos del armario todos nuestros modelitos de fiesta y les dejamos ropa a las demás, después hicimos una pequeña sesión de peluquería y maquillaje y aunque dejamos todo patas arriba nos reímos un montón y acabamos todas guapísimas, como siempre. Mientras nos vestíamos y nos reíamos pensaba en lo bien que nos lo habíamos pasado organizando la fiesta de Rebeca y lo bien que se lo pasaría ella aquel día. Dos horas después, corriendo pero conseguimos estar listas, cuando los chicos llamaron al timbre bajamos todas pintando dispuestas a irnos de fiesta. Bajé corriéndo con mis shorts negros y mi blusa amarilla, me puse una sandalias de tacón que me había dejado Sara. Me sentía bien con mi ropa y encima habían conseguido entre todas que el pelo me quedara genial. A mi lado iban Sara y Alison, Sara llevaba su falda preferida y una blusa azul, y le había dejado a Alison unos pantalones y una camiseta que le quedaban bastante bien. Rebeca iba delante hablando con Dani y El, que también iban preciosas, con dos vestidos que habías comprado Sara y yo la primera vez que fuimos de compras por Londres. En la puerta de nuestro apartamento nos esperaban los chicos, no habían traído sus coches porque pensábamos beber y era mejor ir en táxi, nos acercamos a ellos y me dí cuenta que todos teníamos alguien a quien saludar con un besito en los labios, menos Adam. Se quedó mirándo la escenita romántica con una sonrisa triste en la cara.
- ¿Te veré fea alguna vez? - me dijo Zayn mientras me agarraba la mano. Me eché a reír.
- ¿Eso es otra forma de decir que estoy preciosa? - él también rió y asintió con la cabeza. Le dí otro beso en los labios, pero más largo.
- ¿Cómo repartimos los táxis? - Preguntó Danielle. Me encogí de hombros.
- ¿Tú vienes conmigo? - me preguntó Zayn al oido, con vocecita infantil y divertida. Asentí con una sonrisa en los labios. Y susurré: por supuesto. Tenía claro que todos querían ponerse en parejas, pero Adam...
- Zayn, Adam si viene con nosotros.. ¿vale? ¿Cómo crees que se tiene que sentir después de que todos tengamos pareja menos él? - le dije, bajito, para que nadie más me oyera. Zayn miró a Adam, asintió y me dijo:
- Joder Laura... eres... - dijo sonrió y llamó a Adam para invitarle a ir con nosotros en el táxi, noté como él se alegraba. Me hizo sentir bien. Adam se sentó junto a la ventana, yo me senté en medio y Zayn al otro lado. El conductor nos preguntó a dónde queríamos ir, y Adam le dijo una discoteca de la que nunca he recordado el nombre. Sara se montó en el coche con Rebeca, Harry y Niall, y al final Alison, Dani y El fueron juntas en otro, y Mark, Liam y Lou en otro. Ocupamos entre todos cuatro táxis, y nos dirigimos a la fiesta. Zayn me dio la mano discretamente, sabía que no quería hacer sentir mal a Adam. Yo tenía curiosidad por la frase que Zayn no había terminado antes de llamar a Adam, ¿qué querría haberme llamado? Zayn y Adam empezaron a hablar de cosas que habían hecho en la discoteca a la que íbamos. Por lo que me enteré solían ir bastantes famosos, y a veces había paparazzis o periodístas pesados que no dejaban disfrutar.
- ¿Creéis que habrá periodístas hoy? - pregunté preocupada, no quería que siguieran circulando fotos mías por ahí, ¿y si por un casual las veía mi familia?
- No, tranquila... solo van cuando hay algún evento importante o algo así. No creo que imaginen que una noche cualquiera van a ir famosos por allí, encima somos muy amigos del portero, nos lo pasaremos bien. - contestó Zayn intentado tranquilizarme, Adam sonrió también. Y poco después llegamos. El táxi paró, Zayn nos mandó salir y pagó.
- ¿No deberíamos pagarlo a medias? - preguntó Adam, al salir. Zayn negó con la cabeza, yo sonreí. Los demás empezaron a llegar también y nos juntamos todos en la puerta.
- Bienvenidas a la segunda mejor discoteca de Londres pequeñas. - Sonreímos.
- ¿La segunda? - pregunté Sara. Entonces Lou sonrió, y dijo:
- La primera la conoceremos otro día. - Creo que eso lo entendimos todos, menos Rebeca... pero no le dió demasiada importancía. Estaba sonriente agarrada de la mano de Niall. Y ahí empezó la fiesta. Entramos en la discoteca y empezamos con los tragos, las risas, los bailes. En algunos momentos había gente que se acercaba a nosotros, algunos les pedían autógrafos a los chicos, otros querían sacarse fotos con todos, me sentía rara, pero feliz porque al principio no era nada molesto. La cabeza empezaba a darme vueltas, pero seguíamos a nuestro rollo. Cuando ya llevabamos casi tres horas allí, empezamos a oír gritos a unos pocos metros de nosotras. Los chicos empezaron a correr hacía allí, nosotras íbamos más lentas por los tacones que llevábamos todas. De pronto vimos al portero que era amigo de los chicos agarrando a un chico que había pegado a Adam. Su ojo estaba inchado y tenía la camiseta rota.
- Sacarlo de aquí chicos. - Dijo el portero señalando a Adam con la cabeza. Así que todos salimos a la calle con él, me costaba andar, y a Sara también, porque iba agarrada a mi brazo y no éramos capaces de dar dos pasos rectos. Al salir de la discoteca nos dimos cuenta de que Alison y Mark no estaban, habían ido a pedir algo a la barra y no se habían enterado de nada. Así que Zayn y Liam entraron a por ellos. Los demás nos sentamos en la acera junto a Adam.
- ¿Estás bien? - le pregunto Eleanor.
- No... - dijo Adam, y de pronto empezó a llorar. Sara me miró. Entendí esa mirada. Sara y yo nunca habíamos soportado ver a nadie pasarlo mal, éramos salvadoras voluntarias del mundo entero. Siempre que veíamos a alguien que nos importaba triste o con problemas íbamos en su rescate, su mirada significaba: hay que ayudarle Laura. Y yo lo sabía, sabía que Sara quería que hablasemos con Adam. Salieron los que faltaban de la discoteca y nos dijeron que el portero había echado al chico que había pegado a Adam de la discoteca, que podríamos entrar a divertirnos.
- Ir vosotros, yo me quedo hablando un rato con Adam y cuando se sienta mejor entramos. - les dije a los demás. Todos aceptaron mi idea.
- ¿Seguro que no quieres que nos vayamos a casa Adam? - le preguntó Niall.
- No, no... ¡la fiesta sigue! - dijo intentado simular alegría, pero no lo consiguió, todos sabíamos que estaba afectado. Y demasiado borracho. Zayn me dio un beso en la mejilla, y me susurró al oído: eres perfecta. Sonreí. Sara me giñó un ojo y entraron todos.
- Bueno Adam. - dije cuando ya no quedaba nadie a la vista. - Cuéntame lo que te pasa...
- Nada, Laura, de verdad.. ese tío me ha pegado solo porque me he acercado a pedirle un cigarro a la que por lo visto era su novia... no tenía intención de hacer nada con esa chica... solo le he pedido un cigarro. - Adam seguía teniendo lágrimas en los ojos.
- ¿Te duele? - le dije señalando su ojo inchado. Negó con la cabeza, le habíamos puesto hielo así que parecía que estaba mejor. - Sigo pensando que pasa algo.
- Me da igual lo que piense este tío Laura...
- No me refiero solo a la pelea. Adam, ¿es triste para tí ver que todos estamos... estamos con pareja y tú no? - me costó hacer la pregunta por si le sentaba mal pero el sonrió, otra vez esa sonrisa triste y negó con la cabeza.
- Me encanta que estéis todos con pareja, lo único que me pone triste es no poder estar nunca con la chica que yo quiero.
- ¿Por qué dices eso?
- Llevo... llevo enamorado de mi vecina unos cinco años, pero tiene novio. Después llegastéis vosotras y empecé a sentir cosas por Sara, pero... bueno, ahora está con Harry y me alegro un montón.
- Hay mil peces en el mar Adam. - dije, puso cara de no entender a lo que me refería y me eché a reír, eso le hizo sonreír.
- Que hay un montón de chicas más en este mundo, que algún día encontrarás la adecuada. Estoy segura. Mírame a mí, ¿quién me iba a decir que acabaría siendo la novia de Zayn? - Adam sonrió y asintió con la cabeza.
- Eres una buena amiga Laura, gracias. - se levantó - ¿entramos?
- ¡Claro! - dije sonriente. Empezamos a caminar hacía la puerta pero antes de llegar dijo:
- ¿Me ayudarás?
- ¿A qué?
- A encontrar a la adecuada.
- Por supuesto, pero no te preocupes demasiado.. te lo he dicho, llegará. - Y entramos, y seguimos con la fiesta. Hasta que nos empezamos a cansar de la gente, y todo eso. La verdad es que creo que iba bastante borracha, porque no recuerdo como volvimos a casa. Solo sé que a la mañana siguiente un pitido insoportable me despertó, era el timbre. Me dolía la cabeza muchísimo y ni si quiera me di cuenta de que iba en bragas y camiseta me levanté de la cama de golpe y fui a abrir la puerta todavía con los ojos cerrados. Sara también se levantó pero iba más lenta que yo.
- ¡Buenoooooooos dí... - empezó a decir Zayn antes de ver mi cara. A su lado iba Harry que empezó a reírse como loco. Zayn me abrazó intentado taparme, y Harry hizo lo mismo al ver a Sara también en bragas. Ellos se reían pero nosotras ni si quiera nos enteramos de lo que pasaba.
- ¿Podriaís poneros un pantalón no chicas? - Dijo Zayn entre risas.
- No es bueno que abráis la puerta así por la mañana. - Dijo Harry también riéndose. Sara y yo nos miramos y despertamos de golpe, salimos corriendo a la habitación a ponernos el pantalón del pijama y ya de paso pasamos por el baño a lavarnos la cara.
- Madre mía... ¿con estos pelos he abierto yo la puerta? - le dije a Sara mientras me hacía una coleta. Ella empezó a reírse pero se toco la cabeza y se quejó. - Sí... a mi también me duele mucho. - le dije.
- ¿Qué narices pasó anoche tía? - me preguntó mientras íbamos al salón ya más despiertas y arregladas, aunque seguíamos en pijama.
- Pasó que bebistéis demasiado, y lleváis muy mal la resaca bonitas. - dijo Zayn riendo.
- Os hemos traído el desayuno... - dijo Harry levantando la bolsa que llevaba en la mano. - Aunque es casi ya la hora de comer claro, pero suponíamos que seguiriais en la cama, teniendo en cuenta que no fuistéis capaces ni de meteros en ella.
- ¿Qué? - dijo Sara.
- Tuvieron que traeros Rebeca y Alison antes de irse a casa ellas, fue divertido... - dijo Zayn. Los cuatro empezamos a reír. Miré a Sara con mi cara de: ya nos vale tía. Y ella me entendió, como siempre.
- Bueno, ¿qué? os vestís y nos vamos a dar un paseo para que os despejéis. - propuso Harry, las dos asentimos. Pero antes de irnos a vestir a la habitación cogimos un bollo cada una de la bolsa que había traído Harry, ellos sonrieron.  Sara y yo nos hicimos unas coletas, nos pusimos unos shorts vaqueros cada una. Ella se puso una camiseta naranja que siempre le ha encantado y sus vans negras. Yo me puse una camiseta de rayas blanca y azul y mis converse azules y nos fuimos a dar un paseo con los chicos. Era bonito ir de la mano en pareja, los cuatro paseando por un parque de Londres.
- Sara, - le dije sin importarme que los chicos escucharan. - ¿te das cuenta de que todos nuestros sueños se están haciendo realidad? - Ella se echó a reír, y los chicos también.
- Bueno, hemos venido a Londres, hemos conocido a One Direction y les hemos conocido muy bien... - miró a Harry y a Zayn y ellos sonrieron - hemos hecho surf, nos hemos hecho un tatuaje... ¿nos queda algo más? - me encogí de hombros. De pronto un perro enorme perseguido por otro más pequeño que le ladraba pasaron entre nosotras. Sara y yo sonreímos y nos agachamos a acariciarlos.
- ¡Un perro! - gritamos las dos a la vez.
- ¿Un perro? - preguntó Zayn.
- Nos queda ese sueño, tener un perro... - le contesté. Sara y yo nos incorporamos y seguimos nuestro paseo con nuestros maravillosos novios.
- ¿Cuando decidisteis que todos esos eran vuestros sueños? - preguntó Harry curioso.
- El verano pasado, en una comida en casa de.. Julia, hicimos una lista de todos los sueños que tendríamos que cumplir juntas. - le contesté. Zayn apretó mi mano más fuerte, y le miré. Me besó, no entendí el beso pero me encantó. Harry también besó a Sara. Las dos sonreímos al separarnos de nuestros chicos.
- ¿Y eso? - preguntó Sara.
- Gracias a esa lista de sueños os hemos conocido... - dijo Harry.
- Exacto. - contestó Zayn. No me podía sentir más feliz.

martes, enero 8

Sara (Capítulo 39)


Laura y yo estábamos realmente sorprendidas, más por el hecho de buscarnos en internet y que apareciésemos, que por lo que pensaban las fans. Había de todo. Algunas nos querían un montón, otras nos decían cosas horribles y nos odiaban y había otras que ni nos amaban, ni nos odiaban, simplemente nos respetaban. Suponíamos que eso les había pasado a Danielle y Eleanor, además de que nosotras habíamos estado al otro lado y sabíamos la gran variedad de opiniones que podía haber sobre nosotras, pero tanto leer cosas agradables como otras no tanto, chocaba.
Laura y yo decidimos buscarnos en internet, podía parecer algo estúpido pero queríamos saber que es lo que lo que todo el mundo podía saber de nosotras con solo un clic. En internet estaba nuestra vida entera; como nos conocimos Laura y yo, desde cuando éramos amigas, desde cuando éramos directioners, como vinimos a Londres, la muerte de mi abuela… ahí ponía todo, para mi gusto, demasiadas cosas. También había información de Rebeca y de Alison, había fotos de cuando Rebeca y yo éramos pequeñas y fotos de cuando salimos con los chicos, que no nos hubiésemos imaginado que ningún fotógrafo nos hiciese fotos, un poco iluso por nuestra parte. Había fotos de Laura besándose con Mark y con Zayn, algún otro comentario demasiado grosero acerca de eso y fotos mías y de Harry besándonos. Había demasiadas cosas y teníamos que asimilarlas
- Está bien, olvidemos todo esto- dije cerrando el portátil- lo asimilaremos poco a poco, ahora vámonos a comer- justo en ese momento llamaron al timbre- anda, vámonos- agarré a Laura de la mano, cogí mi cámara y salimos de casa. La veía algo afectada por los comentarios, esperaba que pronto se le pasara
Salimos a la calle y estaba Liam esperándonos con el coche. Nos extrañamos un poco de viniese solo Liam, pero a la vez nos alegramos. Nos montamos en el coche
- ¡hola Liam!- dije contenta
- Hola chicas- dijo con esa sonrisa suya
- ¿a dónde nos llevas?- pregunté abrochándome el cinturón
- A un restaurante, los demás están de camino- subimos la música y estuvimos hablando por el camino, pero Laura no decía nada, Liam se percató- Laura, ¿te pasa algo?- Laura miró a Liam a través del espejo
- Liam, ¿cómo te afectó todo lo que dijeron de vosotros al principio, tanto lo bueno como lo malo?- Liam se sorprendió un poco por la pregunta
- Pues… al principio nos costó asimilarlo todo, a lo bueno sonreíamos y a lo malo… bueno nos costaba, a nadie le gusta que le digan cosas feas ni que solo le vean lo malo- Liam miró a la carretera y se quedó en silencio, Laura seguía sin decir nada- pero al final comprendimos que hay más cosas buenas que malas, que no te tiene que importar lo que piensen de ti, solo lo que piensen los que quieres, el resto son comentarios, con los buenos sonríes y lo agradeces y con los malos simplemente los ignoras y piensas en todos los buenos que te han hecho sonreír- Laura sonrió- y espero que no os dejéis afectar ninguna de las dos por los comentarios que puedan hacer sobre vosotras, porque es por eso ¿no?- Laura asintió mas animada
- Gracias Liam- dijo con una sonrisa.
Liam tenía toda la razón del mundo y me alegraba de que se lo hubiese hecho ver a Laura.
Llegamos al restaurante y ya estaban casi todos, solo faltaban Lou y Adam. Saludé a Harry con un suave beso en los labios y cuando llegaron nos sentamos todos a comer. La comida estaba realmente buena y no parábamos de reír. De vez en cuando se nos acercaban algunas fans para pedirles una foto a los chicos o un autógrafo y los chicos encantados hacían lo que les dijeran. Acabamos todos llenos, menos Niall que todavía se pidió un helado de tres bolas. En toda la comida no paré de hacer fotos para el álbum de Rebe, había fotos preciosas y de todos.
- Bueno chicos- dijo Rebeca levantándose- me tengo que ir, mis padres estarán a punto de aterrizar que han venido a pasar un par de días por mi cumple y esas cosas
- Niall porque no vas con Rebeca a conocer a tus suegros- dijo Louis, Niall se puso rojo y todos reímos
- Eh, bueno…
- Venga Niall, ve, que ya verás como son majísimos- dijo yo animándolo. Rebeca me asesinó con la mirada, se moriría de vergüenza
- Bueno… iré solo si Rebeca quiere- dijo Niall mirándola, ella se puso roja y antes de que dijese algo hablé yo
- Claro que quiere, solo tienes que mirarla- todos reímos y si antes me asesinó con la mirada ahora esta cortada en trocitos y siendo comida para leones. Disimuladamente le hice una foto y cuando se dio cuenta me miro aun peor. Esa foto la pondría bien grande en el álbum.
- ¿quieres?- preguntó Niall a Rebeca, ella asintió y se levantaron, se despidieron y se fueron. Sabía que esto lo pagaría caro por parte de Rebeca
- Bueno chicas nosotros tenemos que ir a comprar el regalo de Rebeca ¿os venís?- preguntó Mark
- No – dijo Danielle- nosotras también tenemos que organizar cosas por nuestra cuenta- todos aceptaron y pagamos
- Adiós cielo- dijo Harry a mi oído agarrándome de la cintura
- Luego te llamo y hablamos- dije mirando esa sonrisa que me volvía loca
- Claro- se acercó a mí y me dio un beso algo mas largo de lo esperado. Nos despedimos de los chicos y nos fuimos al coche de Dani
- ¿a dónde vamos a preparar todo?- preguntó arrancando el coche
- A nuestro apartamento- dijo Laura
Llegamos al apartamento y nos pusimos a prepararlo todo. Envolvimos el vestido que me habíamos comprado y los tacones y lo metimos en una caja, luego entre todas envolvimos un peluche gigante que había comprado Alison y cuando conseguimos envolverlo parecía una pelota gigante, decidí hacerle una foto y luego imprimimos todas las fotos y entre todas las colocamos en el álbum, mi madre también me había mandado algunas fotos de cuando Rebe y yo éramos pequeñas y de Rebeca de pequeña. Entre todas elegimos las mas graciosas y las pusimos, decidimos que las tres ultimas fotos serían la de Rebeca enfadada de ese día, una que había sacado en la que estaba besándose con Niall y otra de todos juntos en ese orden. Acabamos y lo envolvimos.
- Pues está todo- dijo Eleanor acabando de recoger lo último que quedaba- los chicos ya han reservado el sitio, nos que hacer la lista de invitados y pensar la escusa para Rebeca- después de darle muchas vueltas encontramos la escusa perfecta y en la lista de invitados como ni Rebe, ni Laura, ni yo conocíamos gente se encargaron Dani, Els y Ali. cuando acabamos de hacer todo era tarde. Invitamos a las chicas a cenar y nos pusimos las cinco a cocinar
- ¡Sara te suena el móvil!- me gritó Laura desde la cocina. Fui corriendo y lo cogí
- ¿si?
- Hola cariño- dijo Harry, una sonrisa iluminó mi cara
- Uy, ya sabemos quien es- dijo Ali. Le saqué la lengua a todas y me fui a mi habitación
- Hola cielo- dije ya mas tranquila
- Estas con toda las chicas ¿no?
- Si bueno, menos Rebeca que estará con sus padres y Niall
- No, Niall ya está aquí y Rebeca le dijo que iba para allí ¿no ha llegado?- de repente sonó el timbre
- Ahora si- reí - ¿qué tal lo ha pasado Niall?
- Dice que al principio algo cortado pero luego bastante bien, dije que son simpáticos- me alegré por ellos
- Lo son- dije acordándome de sus padres
- Bueno cariño te llamaba para decirte que hemos pensado salir de fiesta esta noche, ¿os apetece?
- Claro que nos apetece- dije sabiendo que a las demás les apetecería
- Vale, pues dejarle ropa a las chicas y os pasamos a buscar a todas en dos horas ¿vale?
- Vale amor
- Te quiero
- Y yo Harry- colgué y salí de la habitación. Cuando llegué a la cocina todas se callaron y me miraron
- ¿qué pasa?- pregunté extrañada
- Que calladito te lo tenias eh- dijo Rebeca, todas asintieron menos Laura que me miró como pidiéndome disculpas
- ¿Cuándo pensabas contárnoslo?- pregunto Dani
- Pero ¿el qué?- todas me miraron y lo entendí todo- ah, eso…- dije poniéndome colorada- ¡es que no me habéis dejado tiempo!- protesté, todas reímos y nos pusimos a cenar- ah, por cierto me a dicho Harry que salimos de fiesta esta noche todos juntos, que en menos de dos horas están aquí a buscarnos
- ¿y nosotras que hacemos? no nos da tiempo a ir a cambiarnos y volver- dijo Ali
- Os prestamos ropa, ya nos la devolveréis- todas aceptaron la propuesta
- Pues démonos prisa, somos seis y tenemos menos de dos horas- dijo Els
Todas recogimos la cocina rápido y nos empezamos a preparar.

lunes, enero 7

Laura (Capítulo 38)


Después de comer Rebeca se fue a casa y pasé la tarde sola en el apartamento, así que me puse a limpiar y a ordenar un poco pensé que Sara llegaría tarde y como me apetecía muchísimo estar con Zayn decidí llamarle.
- Hola pequeña.
- Hola guapo, ¿qué haces?
- Pues me he estado echando una siestecita que estaba cansado y ahora me iba a la ducha.
- Quiero verte... - le dije poniendo una voz lo más dulce posible.
- Me llama la chica que más quiero diciéndo que quiere verme con esa vocecita, ¿cómo resistirme? - Los dos reímos.
- ¿Te viénes a cenar?
- Claro princesa, ¿te parece si llevo comida tailandesa?
- Vale, me parece perfecto.
- Pues me ducho en dos minutos y estoy allí.
- ¡Bien! - dije, emocionada y feliz.
- Te quiero.
- Y yo. - colgué y me senté a ver la tele hasta que llegase. No tardó ni media hora, sonó el timbre y fui corriendo a abrir. Estaba ahí con su sonrisa y la bolsa de la cena, con una camiseta de manga corta que dejaba ver sus brazos, con esos tatuajes tan sexys. Sonreí y le di un beso en los labios, suave. Pero él me agarro de la cintura y me dio otro más intenso. Entramos y nos sentamos en el sofá.
- ¿Tienes hambre ya? - le pregunté por si quería empezar a cenar ya. Pero se quedó mirándome, sin responder, sonriendo... así que volví a preguntar. - Zayn, cariño, ¿cenamos?
- Sí, claro... - dijo, sin quitar la sonrisa de su boca.
- ¿Por qué sonríes tanto bobo? - le dije mientras no sentábamos en la mesa.
- No lo sé, estás preciosa hoy.
- ¿Preciosa? Zayn, voy con unos short vaqueros normales y un niki viejo que uso para estar por casa. Encima tengo unos pelos horribles de haber estado tumbada en el sofá...
- Pero tu mirada cada día es más bonita, y tú sonrisa también. - Sonreí, me encantaba cuando se ponía tan romanticón. Nos sentamos en la mesa y empezamos a cenar la comida que había traido Zayn, nos reímos un montón porque yo nunca había probado esas cosas y ponía caras raras cuando no me gustaban. Y él seguía dándome comida para probar. Después de cenar me ayudó a recoger todo.
- ¿Sara no viene a dormir?
- No lo sé, me imagino que sí...
- ¿Crees qué...? - me eché a reír y no contesté. No lo había pensado, pero seguramente sí, porque Sara estaba preparada. Hoy era su día. Sonreí pensando en eso.
- ¿Te apetece ver una peli hasta que venga? No quiero estar solita... - le dije, poniendo carita triste.
- ¿Cómo no iba a querer ver una peli contigo? - Nos sentamos en el sofá, me rodeó con su brazo y apoyé mi cabeza en su hombro. No sé que película vimos, en realidad no atendí mucho. De vez en cuando me besaba o me acariciaba la cara. Me sentía genial, protegida. Estaba tan agusto que en un momento no pude evitar susurrar.
- Te quiero Zayn. - No me oyó, porque me miró y dijo:
- ¿Has dicho algo pequeña?
- Que te quiero... - sonrió y me dio otro beso, todavía más perfecto que todos los anteriores.
- Yo más. - dijo al separar sus labios de los míos.
- Eso es imposible. - le dije, le miré fijamente a los ojos y sentí que me daba igual lo que pasara con mi vida a partir de ese momento pero que no podía separarme de él, nunca.
De repente se abrió la puerta del apartamento, Sara con una sonrisa inmensamente grande entró por la puerta. Le miré a los ojos y supe perfectamente que había pasado.
- Uy, no sabía que estabas acompañada. - Zayn y yo nos levantamos del sofá.
- Sara, ¿qué tal ha ido? - ella sonrió y se sonrojó un poco.
- Bueno chicas, yo me voy que creo que tenéis cosas que contaros.. yo ya me enteraré por otras fuentes. - dijo Zayn mirando a Sara. Me dio un beso suave en los labios, cogió su chaqueta y se acercó a la puerta.
- Mañana te llamo pequeña. - Me dijo despidiéndose de nosotras con la mano.
- ¡Cuéntamelo todo ya! - le dije a Sara tirándome al sofá y ofreciéndole un sitio a mi lado. Ella se sentó y me lo contó... me contó que se había puesto muy nerviosa, pero que fue increíble. Me sentía feliz por ella, la veía contenta. Después nos fuimos a la cama y nos quedamos dormidas charlando de todas esas cosas.
A la mañana siguiente nos despertó el teléfono. Salté de la cama y fui a contestar.
- ¿Sí?
- ¡Buenos días dormilonas!
- ¡Liam! ¿Qué pasa?
- Pues llamo porque hemos decidido ir a comer por ahí todos juntos, ¿os apetece?
- ¡Claro! ¿Todos?
- Sí, sí, todos.
- ¡Qué guay! - Liam se echó a reír al otro lado del teléfono, me apetecía un montón comer con todos. Niall y Rebeca juntos, El, Dani, Liam, Louis, Harry, Sara, mi perfecto Zayn, Mark con Alison, Adam... de repente pensé en Adam. Era el único que no tenía pareja, pobrecito.
- Bueno, pues en una hora pasamos a recogeros, ¿vale? Voy a ir llamando a todos los demás.
- ¡Vale! - colgué el teléfono y le conté a Sara el plan, después le dije lo que había pensado de Adam.
- Tía... hay que buscarle pareja a Adam. - me dijo. Asentí con la cabeza, ya idearíamos un plan. Nosotras somos así...
Nos duchamos y nos vestimos en un tiempo record. Creo que nunca lo habíamos hecho todo tan rápido. Ni si quiera desayunamos porque ya era demasiado tarde, nos vestimos tan rápido la dos con unos shorts, los míos amarillos con una camiseta blanca de flores y los suyos vaqueros con una camisa azul que no sobró tiempo. Todavía quedaba un ratito hasta que vinieran a por nosotras así que decidimos mirar cosas en internet. Entramos en nuestros twitters, cosa que no hacíamos desde hace mucho y nos sorprendió demasiado lo que encontramos. Teníamos miles de seguidores más, un montón de menciones de la gente.
- Dios mío Sara, la gente... la gente nos conoce.
- Ay Laura, ¿crees que nos odiarán? - me dijo Sara con tono preocupado. Y empezamos a leer lo que la gente decía de nosotras. Nos sorprendimos, bastante.

viernes, enero 4

Sara (Capítulo 37)


Noté una fuerte luz que chocó contra mi cara, rápidamente me di la vuelta en la cama y me tapé la cara con la almohada, noté como unas manos me hacían cosquillas por la espalda, no pude reprimir la risa y comencé a reír aun con los ojos cerrados.
- Laura, para- conseguí decir entre carcajada y carcajada
- ¿Quién te a dicho que sea Laura?-esa voz… abrí los ojos y me encontré con los ojos marrones de Rebeca- ya era de que abrieras los ojos- me sonrió-buenos días- ¿Qué hacía aquí Rebe?
- Buenos días- dije algo confundida -¿Qué haces aquí?- pregunté mientras me estiraba en la cama
- Pasaba por aquí y decidí venir a veros, he comprado churros- se me iluminó la cara cuando oí la palabras churros
- ¿y Alison?
- De compras con su madre- dijo Rebeca mientras salíamos de la habitación
- Mejor, más churros para mi- Rebeca y yo reímos y llegamos a la cocina donde estaba Laura haciendo chocolate. Cuando estuvo listo nos pusimos a desayunar
- Bueno quieres contarnos ya que tal ayer con Nialler- dijo Laura mientras se terminaba un churro, pareció leerme la mente. Rebeca se empezó a reír
- No se os escapa ni una eh- Laura y yo negamos con la cabeza- pues me pasó a buscar a las seis y me llevo a un parque con un lago y dimos una vuelta en una barca, luego cuando bajamos de la barca me llevó a un sitio escondido entre arbustos y había un picnic, todo muy romántico- Rebeca se sonrojó- brindamos con champán, todo era perfecto- vi como se le iluminaban los ojos- y…
- Te pidió salir- interrumpí yo
- Pero no lo estropees Sara- protestó Laura
- Si… me pidió salir y dije que si, a ese rubio irlandés no se le puede decir que no a nada- Rebeca volvió a ponerse roja- pero… ¿Cómo lo sabias?
- Intuición- mentí. Acabamos de desayunar y nos quedamos toda la mañana en casa hablando y haciendo el idiota. A la hora de comer decidimos preparar algo de pasta y cuando la estábamos haciendo llamaron al timbre- ¡ya voy yo!- grite a Laura que estaba en el baño. Abrí la puerta y me topé con una ramo de rosas rojas y detrás la perfecta sonrisa de Harry
- Feliz aniversario amor- me abalancé y salté encima de él. Acaricié sus rizos con mis dedos
- Feliz aniversario- susurre mientras me acercaba para besarle. Nos fundimos en un tierno beso y me bajó al suelo
- Toma, son para ti- dijo ofreciéndome el ramo.
- Harry, son preciosas- Las acerqué a mi nariz y aspiré su aroma. Entré dentro y cogí un jarrón. Eché un poco de agua y las metí dentro.
- Vengo a pasar el resto del día junto a mi chica- dijo mientras cerraba la puerta de casa
- Ummm… perfecto, me cambio y nos vamos- me fui a la habitación de la ropa y dejé a Harry con Laura y Rebeca, esperaba que no le torturasen mucho a preguntas. Me puse unos vaqueros cortos claros, una blusa blanca suelta de tirantes que me regaló Laura, unas sandalias marrones y un bolso grande del mismo color. Metí en el bolso el móvil la cartera y el regalo de Harry y fui al baño a arreglarme un poco. Decidí maquillarme un poco. Un día es un día. Me puse un poco de base una sombra de color cobre y un poco de rímel. Salí del baño
- estoy- dije poniéndome las gafas de sol
- Mira que has tardado eh- dijo Harry agarrándome de la cintura
- Tú a callar- le dije con una sonrisa- nos vamos chicas- nos despedimos de Laura y Rebeca y nos montamos en el coche en dirección a casa de Harry- ¿te han torturado mucho a preguntas?- dije con una sonrisa, que no iba a desaparecer en todo el día de lo contenta que estaba
- Un poquito- dijo poniendo cara de niño pequeño
- Pobrecito- dije haciéndome la preocupada- tendré que cuidarte mejor a partir de ahora
- No podrías cuidarme mejor- me acerqué a él y le deposité un beso en la mejilla. Llegamos a su casa y no había nadie por allí
- Había pensado llevarte a un restaurante, pero luego lo pensé mejor y he cocinado yo- dijo orgulloso
- no habrás quemado nada ¿verdad?
- ¿estás dudando de mis dotes culinarios?- protestó
- Puede- dije riendo
- Al final de la comida retirarás lo dicho
- Ya veremos- le reté
Comimos de primero una ensalada de pasta, de segundo un solomillo y de postre una tarta y todo lo había echo Harry
- Uff- dije comiendo el último cacho de tarta- estoy llena… retiro mis dudas de tus dotes culinarios
- Eso quería oír- dijo con una sonrisa ancha. Se acercó y me dio un ligero beso en los labios- ayúdame a recoger- estuvimos recogiendo un poco todo y cuando acabamos nos tumbamos el sofá. Nos quitamos los zapatos y yo apoyé la cabeza en sus piernas y él comenzó a acariciarme el pelo. Estuvimos así un buen rato hasta que Harry paró de acariciarme el pelo- ¿y eso?- abrí los ojos y vi que estaba señalando mi tatuaje
- Me lo hice ayer con Laura, lo tenemos las dos igual solo que yo en el tobillo izquierdo y ella en el derecho- me moví y puse el pie encima de Harry para que pudiera verlo mejor- ¿te gusta?- Harry lo acarició con la yema de los dedos
- Es realmente precioso… y tiene una J en la tripita de…- no le dejé acabar
- De Julia- dije mirando el tatuaje
- Precioso- volvió a añadir- estoy por tatuarme su nombre en el pecho
- ¿Cuál? ¿Julia?
- Claro, gracias a ella te conocí a ti, se lo debo todo
- No seas idiota- reímos ante su comentario- si te haces otro tatuaje que sea con mi nombre- dije en broma
- ¿te gustaría que me tatuara tu nombre?- preguntó serio
- ¿lo harías?- dijo yo algo incrédula
- Si eso te haría feliz… lo haría- dijo Harry mirándome con ternura
- Cariño- me acerqué mas a él y le acaricié la cara- no quiero que te tatúes mi nombre, con saber que te tengo a mi lado soy la más feliz de este mundo- me acerqué a su cara y rompimos la distancia en un corto beso
- Vale, quiero darte ya mi regalo- dijo él levantándose del sofá- espera ahí- subió las escaleras y al rato bajo con un sobre – ábrelo- me entregó el sobre mientras se sentaba, miré el sobre y le di la vuelta, me mordí el labio.
Abrí el sobre con cuidado y saqué dos billetes de avión… con destino a París…
- París…- susurré
- Si, es para dentro de dos fines de semana, tu y yo, solos, cuatro días
- Harry, esto es…- sentía una inmensa felicidad, tenía ganas de llorar de felicidad. Le miré a los ojos y me tiré encima suyo- te quiero, te quiero, te quiero, te quiero- dije mientras le daba besos por toda la cara- ahora el mío- dije levantándome a por el bolso
- No tenías que comprarme nada Sara- dijo incorporándose
- Ni tú y mira dentro de dos semanas nos vamos a París
- Bueno pero mi regalo es para compartir
- Y él mio también- Harry me miró extrañado. Saqué la caja del bolso y se la tendí. Le dio una vuelta a la caja y la abrió. Se quedó callado mirando su interior. ¿pero por qué no decía nada? Cogió los dos collares que había dentro y al ver que seguía sin decir nada, me puse nerviosa y empecé a hablar yo- es una tontería comparado al lado de tu regalo pero me hacía ilusión y me pareció un bonito regalo además tiene grabado por detrás…
- Son preciosos-dijo interrumpiéndome
- ¿de verdad te gustan?- él asintió sin apartar la vista de los collares, les dio la vuelta a las gotitas que colgaban y vio el grabado. En uno ponía un S y en otro una H, el suyo era el de la S y el mio el otro. Harry me miró a los ojos y se puso el collar de la S, luego cogió el otro y me retiró el pelo de la espalda y me puso el de la H, cuando cerró el enganche me beso en el hombro y toda mi piel se erizó.
Me di la vuelta para mirarle su cara estaba a pocos centímetros de la mía. Se acercó hasta que nuestras narices se rozaron y podía notar su respiración, besó la comisura de mis labios, luego el labio superior y por último unió sus labios a los míos suavemente. Una sensación cálida recorrió todo mi cuerpo, Harry me agarró de la cintura y me tumbó en el sofá. Comenzó a darme besos por el cuello y volvió a subir hasta quedarse a la altura de mi boca
- Ven quiero darte mi segundo regalo- me agarró de la mano y me condujo por las escaleras
- ¿otro? Harry no quiero más regalos- protesté
- Tú calla y cierra los ojos- obedecí algo enfadada. No quería mas regalos ¿le parecía poco el regalo que me había echo? Refunfuñe para mis adentros. Entramos en una habitación- ya puedes abrirlos- dijo abrazándome por detrás y apoyando su cabeza en mi hombro. Ante mí estaba la habitación de Harry completamente cambiada. En el centro estaba la cama con pétalos de rosa de color rojo por la cama y por el suelo y en medio de la cama había una rosa. Por el suelo había velas haciendo un camino hasta la cama y por el resto de la habitación había velas que era la única luz de la habitación. Harry empezó a hablar- como dijiste el otro día que estabas preparada me pareció bonito organizarte esto por el día de nuestro aniversario y… ¿te gusta?- no podía hablar las palabras no me salían. Asentí con la cabeza.- pero… di algo…- dijo con un tono de preocupación
- Harry… esto… esto es maravilloso, de verdad, con esto lo vas a hacer mas perfecto de lo que ya era
Harry me dio la vuelta y me miro a los ojos, sonrió y me besó pausadamente, yo le devolví el beso y él aumentó el ritmo de los besos. Posó una de sus manos en mi cintura y la otra la metió por dentro de la blusa y la apoyó en mi espalda pegándome más a él. Estaba realmente nerviosa. Suavemente me quito la camiseta y me separé de él. Me mordí el labio inferior y le imité quitándole yo a él la suya. Me volvió a agarrar de la cintura y fue dando pasitos hacia adelante mientras yo los daba hacia atrás y me daba besos leves el cuello. Mis piernas chocaron con la cama. Harry me cogió y dejó en la cama con suavidad apartando la rosa que había en el medio. Él se quedó encima de mí y me empezó a acariciar el vientre con una mano mientras que con la otra me desabrochó el sujetador. Yo entrelacé mis manos en su cuello y acaricié sus rizos mientras mordía con suavidad su labio. Se deshizo de mi sujetador. Pegué mi cuerpo contra el suyo y él empezó a darme besos por el cuello, pero esta vez no paró y siguió bajando hasta mi vientre, yo solté un leve gemido, él elevo la cabeza, me miró a los ojos y se acercó a mi oído, me susurro, tranquila y luego mordió mi lóbulo. Bajó sus manos hasta mi cintura y buscó los botones del pantalón, cuando los encontró, los desabrochó y me los quitó suavemente yo le imité y le quité los pantalones con ayuda de él. Me pegó más a él en un beso notando toda su entrepierna. Suspiré. Volvió a besarme y entré beso y beso se deshizo de mis braguitas. Yo acaricié su abdomen con las dos manos y al llegar a sus bóxers hice lo mismo. Se acercó a la mesilla y cogió un condón, cerré los ojos y oí como se rasgaba el sobre, los abrí de nuevo y Harry se lo colocó y se acercó a mi oído
- Harry, no me hagas daño- susurre con el corazón apunto de salirse de mi pecho
- Confía en mi- dijo mientras me daba un beso en el cuello
- Siempre lo he hecho- Harry subió y me miró a los ojos
- Te quiero Sara
- Te quiero Harry- dije mirando sus preciosos ojos
Me dio un suave beso en los labios y con cuidado me hizo suya, haciendo que solo fuéramos uno.

jueves, enero 3

Laura (Capítulo 36)

Nos hicimos un tatuaje. Sara y yo compartíamos un montón de sueños, cosas que siempre habíamos querido hacer juntas... ir a Londres, conocer a los chicos, hacernos un tatuaje de un búho en el tobillo. Y, aquel verano era verano de cumplir sueños. Decidimos hacernos aquel tatuaje del búho en el tobillo, y en honor a la mujer que había hecho posible que todos esos sueños se hicieran realidad nos pusimos un pequeña J en medio de su barrigita.

Después de hacernos el tatuaje, felices nos fuimos a comer a un restaurante de comida Italiana, pedimos pasta, como no. Mientras comíamos le conté a Sara mi noche con Zayn.
- No pasó nada... no fui capaz Sara. - Le dije, mientras la miraba comer. Me miró y sonrió.
- Tranquila Laura, ya te verás preparada algún día... yo ya lo estoy, pero porque ya llevo algo más de tiempo con Harry, tú y Zayn habéis empezado hace menos tiempo... tranquila.
- Dice que me esperará, que no le importa, que quiere que yo me sienta agusto... y le quiero tanto que quiero sentirme preparada ya, pero me da miedo.
- Laura, de verdad, no te preocupes. - Me sonrió y consiguió, como siempre, tranquilizarme. Seguimos comiendo y al rato se me ocurrió una idea.
- ¡Sara! ¿Qué te parece si hacemos tarde de chicas hoy? ¿Llamamos a Eleanor y a Danielle? ¿Y a Rebeca y a Alison? Y nos vamos de compras... ¿vale?
- ¡Geniaaaaaaal! - Terminamos de comer y llamé por teléfono a Dani, estaban de acuerdo, les apetecía un montón así que quedamos a las 5.
- Dani y El se apuntan, también esetán comiendo juntas. - Sara sonrió y cogió su teléfono para llamar a Rebeca. Estuvo hablando unos dos minutos con ella y después colgó.
- Alison también viene... pero Rebe ha quedado con Niall. - Me dijo con sonrisa pícara, yo sonreí. Podía imaginarme la alegría de Rebeca, lo feliz que sería.
- Tiene que estar emocionadísima con esto de Niall, ¿verdad? - le dije mientras andábamos.
- ¡Dios mío Laura!
- ¿Qué?
- El 17 es el cumple de Rebe... he estado pensando tanto en mis dos meses con Harry que se me había olvidado por completo.
- Osea, que está tarde es perfectísima para planear algo, comprarle el regalo y todo.
- ¡Pues sí! - No pudimos evitar reírnos y chocar los cinco, la jugada nos había salido perfecta.
A las 5 nos reunimos con las chicas en una cafetería, Alison llegó un poco más tarde porque tenía que venir de muy lejos. Les informamos de que dentro de seis días era el cumpleaños de Rebe y teníamos que organizarlo todo urgentemente, les encantó la idea. Danielle llamó a Liam y le pidió que se encargaran de reservar un sitio genial para preparar una increíble fiesta. Liam estaba con Louis, Harry, Zayn y Mark y les comentó todo. Niall estaba con Rebeca y Adam trabajando así que les tendríamos que contar nuestra idea en otro momento. Después nos fuimos de compras, decidimos comprar vestidos para todas, y también para Rebeca, un vestido perfecto. Me sentía como en una película, nos metimos en un montón de tiendas, nos probamos miles de vestidos una a una, salíamos del probador y dabamos nuestra opinión, era muy divertido y no paramos de reír en toda la tarde. Había vestido de todos los colores y formas. A Rebeca le compramos uno largo, hasta el suelo, de un rojo intenso que estabamos seguras de que le quedaría genial. Era de tirantes y algo ajustado, con unas saldalias de tacón negras con más que preciosas. Sara se compró un vestido de honor ceñido hasta el pecho y pomposo, rosa palo, un color que le sentaba de maravilla, en medio el vestido tenía un lazito negro monísimo, a conjunto con sus zapatitos (negros), su vestido llegaba hasta el muslo porque decidimos que la única que llevaría vestido largo sería Rebeca. Mi vestido era morado, por supuesto, ajustado hasta la cintura y algo más pomposo hasta encima de las rodillas. Con un pequeño cinturón de flores en la cintura, también me compré unos zapatitos de un taconazo increíble, negros. El vestido de Eleanor también era precioso, azul celeste de tirantes y con algo de vuelo, le hacía un cuerpo perfecto y le convencimos para que se comprara unas sandalias de tacón de un azul más oscuro que el vestido que tenían unas florecillas también azul celeste. Dani se compró un vestido negro y ajustado de manga corta, con un escote flipante y su tacones eran de un amarillo fosforito que le daba un toque más alegre a su conjunto. El vestido de Alison era verde oscuro, también de tirantes y con algo de vuelo su zapatos eran de un beis muy bonito. Íbamos todas preciosas. Sara tuvo la increíble idea de hacerle a Rebeca un álbum de fotos así que no paró de sacar fotos mientras nos probábamos ropa o paseábamos por las tiendas. No paramos de reír y a la hora de cenar cuando llegamos a casa Sara y yo estábamos agotadísimas.
- ¿Sabes? Voy a llamar a mi madre para que mande fotos de cuando Rebeca y yo éramos pequeñas. Nos va a quedar un álbum genial.
- Vale, me parece buenísma idea, voy a preparar la cena...
Preparé un poco de pollo y después de que Sara hablase con su madre nos sentamos a cenar.
- ¡Voy a llamar a Harry! Que ya es nuestro día... - dijo a las 12 de la noche. Yo me reí y recogí todo mientras ella hablaba con su novio. Me sentía genial allí, con la mejor amiga del mundo, con el mejor novio del mundo... en Londres. Y empecé a pensar que sería perfecto vivir ahí, aunque echaba mucho de menos a mi familia...
Cuando Sara terminó de hablar por teléfono con Harry decidimos empezar a preparar un poco el álbum de Rebe, imprimimos un montón de fotos de todas las cosas que habíamos hecho. Sara no se separaba de nuestra cámara en ningún momento así que había fotos de todos los días. Decidimos elegir de portada una foto que sacamos el día que vimos todos una película, Rebeca salía junto a Niall y los dos riéndose estaban monísimos. Sara y yo pasamos casi una hora eligiendo fotos y riéndonos un montón, pero se hizo muy tarde y estábamos tan agotadas que nos fuimos a la cama sin charlar. Pero, está claro, que fue un día muy divertido, nos habíamos reído un montón. Me dormí pensando en las inmensas ganas que tenía de ver a Zayn.

Nuestros lectores: